Suecia ofrece una combinación perfecta de paisajes naturales, aldeas medievales y arquitectura moderna. Además, una muy variada oferta de ocio, desde un tour turístico por la ciudad, hasta de una jornada de escalada en alguno de sus Parques Nacionales, completa esta gran oferta. Hasta un 15 % de su superficie está situado al norte del círculo polar ártico. El Parque Nacional de Abisko en Laponia es uno de los lugares más espectaculares del planeta, además del escenario de auténticas auroras boreales.
El museo de ABBA y el Museo Vasa son, con certeza, algunas de las atracciones turísticas más importantes de Estocolmo, la capital de Suecia. En el Museo Vasa, se puede visitar incluso un auténtico buque de guerra del siglo XVII, rescatado del fondo del mar hace tan solo un par de décadas. La residencia oficial de la familia real sueca, el Palacio de Drottningholm, y la ciudad de Visby (la mayor en la Isla de Gotland), forman parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Allí, espectaculares jardines de rosas rodean las ruinas medievales y las antiguas construcciones del siglo XVII. La Catedral de Lund, ciudad que destaca por el estilo clásico de su arquitectura, es una de las primeras representaciones del estilo románico. Pero Suecia también cuenta con un gran número de estructuras modernas y de diseño. Un buen ejemplo de ello es el puente Öresund con sus 8 kilómetros de longitud, que conecta la ciudad sueca de Malmö con Copenhague, la capital danesa.
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